Edad 81
El puro gozo de Hermana Anna en la vida y su fidelidad callada a su compromiso a la Misericordia la hicieron una presencia acogedora en todas partes.
Nacida en la Ciudad de Nueva York, su primer encuentro con las Hermanas de la Misericordia fue en la anterior Escuela de Santa Cecilia y la Preparatoria de la Catedral, las dos en Manhattan. Después de graduarse de la Preparatoria de la Catedral, Anna entró a las Hermanas de la Misericordia de la Provincia de Nueva York en septiembre de 1960 en Dobbs Ferry, Nueva York y enseñó por un año en la primaria donde ella asistió, Santa Cecilia.
Recibió maestrías en francés de la Universidad de la Asunción en Worcester, Massachusetts, y en teología del Seminario de la Inmaculada Concepción en Huntingdon, Nueva York. Anna enseñó francés y religión por años a nivel de preparatoria en Nuestra Señora de la Victoria en Dobbs Ferry, Nueva York; en San Simón Stock y en Cardenal Spellman, las dos en el Bronx.
Firmemente arraigada en su lema, «Fe y Amor», Anna encontró una fuerza interior en medio de los riesgos, demandas y dificultades de la vida. A través de los años Anna siempre fue una integrante muy activa de la comunidad, sirviendo como parte de comités, en el Equipo de Formación de la Misericordia o como animadora o participante en muchos grupos de oración. A Anna le gustó la música, especialmente cantar en el coro de la Iglesia de la Transfiguración como también asistir a espectáculos y eventos en Broadway.
En 2017, la salud de Anna se empeoró. Necesitaba cuidado médico especializado. Fue necesario que se mudara de Nueva York para la atención especializada en el Convento McAuley en Merion, Pensilvania.