Hermana Patricia McDermott es presidenta del Instituto de las Hermanas de la Misericordia de las Américas, que incluye los Estados Unidos continentales, el Caribe, Centroamérica y Sudamérica, y los países del Pacífico de Guam y las Filipinas.
Comenzó su carrera enseñando inglés, periodismo y educación religiosa a nivel secundario, que continuó durante 10 años antes de tomarse un tiempo para completar sus estudios de doctorado. Después de esto, enseñó teología pastoral en Catholic University of America.
Luego de asumir un papel de liderazgo en el Equipo Administrativo Provincial de las Hermanas de la Misericordia, Pat se desempeñaría más tarde como presidenta de las Hermanas de la Misericordia en Omaha, Nebraska. En 1999, fue elegida miembro del Equipo de Liderazgo del Instituto de las Hermanas de la Misericordia de las Américas antes de ser elegida para su puesto actual como presidenta, en 2011.
La pasada experiencia ministerial de Pat incluyó la presentación de talleres en áreas de educación religiosa y espiritualidad. Ha colaborado en programas parroquiales de educación para adultos; visitó y trabajó con ancianos en centros y hogares de atención; y enseñó Sagradas Escrituras a grupos parroquiales y universitarios.
Pat ha ocupado muchos puestos en directivas de ministerios que brindan atención médica, educación y vivienda, donde ha trabajado con colegas laicos y religiosos. Valora el compromiso con la misión de la Misericordia que ve en colegas del ministerio y que atestiguan el legado de Catalina McAuley brindando múltiples respuestas a las necesidades de nuestro mundo que sufre.
Pat dice cómo su experiencia en el ministerio la ha preparado para el liderazgo:
«El aprendizaje más significativo de mi ministerio de servicio comunitario ha sido la conciencia constante del don del cargo. Mi atención y confianza en esta energía sagrada me sostiene. Vivo en un «espacio» de gracia profunda donde la energía sagrada dentro, alrededor y sobre mí me guía y dirige. De este don he aprendido de maneras pequeñas y sorprendentes, y confío inmensamente en la integridad de esta presencia de gracia».
Hermana Patricia McDermott, Presidenta del Instituto