Edad 102
Hija de inmigrantes alemanes y en una familia de siete niños y niñas, Hermana Mary Albertus alcanzó la edad de 102 años. Por haber nacido y crecido en una granja de Meridale, Nueva York, toda su vida sintió un profundo aprecio y reverencia por la gloria de Dios reflejada en la naturaleza.
A los 18 años ingresó en las Hermanas de la Misericordia en Albany, Nueva York. Estudió y se licenció en Filología Inglesa en College of Saint Rose de Albany (Nueva York), y obtuvo una maestría en Historia en Siena College de Loudonville, Nueva York. Durante más de cincuenta años, se dedicó a la enseñanza en numerosas escuelas de la Diócesis de Albany.
De las aulas, Albertus pasó al ministerio en St. Peter’s Hospital de Albany, Nueva York. Sus responsabilidades incluían funciones en la sala de correo tales como introducción de datos y mensajería, además de desempeñarse como hermana de oración y presencia.
Albertus disfrutó siempre de memorizar poemas, humorísticos y profundos, algunos de los cuales todavía era capaz de recitar en su vejez. Excelente costurera, ayudaba con generosidad a las hermanas en sus proyectos de costura, para deleite y alivio de las que no estaban tan dotadas. Poseía un carácter ecuánime, caracterizado por su capacidad para hacer reír a los demás y reírse de sí misma.
A pesar de su avanzada edad y de tener problemas de memoria, seguía siendo una bendición para todas las personas que la conocían, incluidas sus abnegadas cuidadoras del Centro San Pedro para el Cuidado y Rehabilitación, en Albany. Hermana Mary se veía a sí misma como una caminante, una peregrina en su viaje de regreso a Dios.