Con un clima perfecto, más de 50 Hermanas de la Misericordia, asociadas y asociados de la Misericordia y colegas en el ministerio de la Misericordia se unieron a miles de personas en Pennsylvania Avenue, frente al Capitolio de los EE. UU., para escuchar cómo, discurso tras discurso, se describía la disparidad económica y sanitaria que vive cerca de la mitad de la población de los Estados Unidos. Gran parte del mensaje del día fue un poco difícil de asimilar: ¿Cómo puede ser que en la nación más rica del mundo, los que sufren de pobreza «incluyan al 43 % de toda nuestra población y al 52 % de nuestros niños y niñas, que han muerto a un ritmo de 2 a 5 veces mayor durante esta pandemia, y 250.000 de los cuales murieron por la pobreza y desigualdad cada año?».
Quienes formaron parte de la delegación de la Misericordia vinieron de lugares tan lejanos como California y de todo el país. Varias hermanas viajaron por la noche en autobuses, incluyendo a Hermanas Grace Miller y Rita Lewis, junto con otras de la Casa de la Misericordia que atiende a residentes de Rochester y que sufren de falta de vivienda.
Reverendo Dr. William J. Barber II enumeró las disparidades: «Este es un movimiento hasta que los niños estén protegidos; hasta que los enfermos sanen; hasta que se pague a empleados y empleadas de bajos ingresos; hasta que las personas inmigrantes reciban un trato justo; hasta que se ofrezca una vivienda asequible; hasta que se proteja la atmósfera, la tierra y el agua; hasta que sea más importante salvar el mundo, la diplomacia y vivir en paz que explotar el mundo», y añadió, «ya no callaremos más».
Hermana Patricia Hartigan, dijo: «Había… [un] espíritu allí: el de las personas enérgicas que vinieron para ser apoyo y soporte de quienes a menudo se les descuida en sus necesidades humanas básicas, si no es que son ignoradas por quienes detentan el poder». Pueden ver el video y estar pendientes de los próximos pasos mientras la Misericordia renueva su lucha por una relación correcta con nuestras hermanas y hermanos que sufren de pobreza y racismo.