donar
conmemoraciones

Hermana Ruth McAndrew

idiomas
compartir
Share this on Facebook Print

Edad 98

Ruth McAndrew nació el 22 de enero de 1927 en Omaha, Nebraska, una de diez hijos e hijas; le precedieron en la muerte sus padres, Martin y Anna, sus hermanos y hermanas:  Vincent, Bernadette, Ann, Mary, Josephine, Martin, Emmet y Margaret; y la sobrevive Patricia Rochford.  Sus padres, Anna Lynch McAndrew y Martin McAndrew, emigraron desde Irlanda; su padre del Condado Mayo y su madre del Condado Carlow.   

Ruth asistió a la Primaria de San Bernardo en Omaha y la Preparatoria de la Misericordia en Council Bluffs, Iowa. Ella entró a las Hermanas de la Misericordia en Mount Loretto en Council Bluffs en 1944 y se graduó en 1946. Ruth profesó votos temporales como Hermana de la Misericordia el 12 de marzo de 1947 y votos perpetuos el 16 de agosto de 1950. Ella tomó como su lema: «Jesús, te amo».   

Su primer ministerio la llevó al Orfanato de Santiago en Omaha, donde ayudó a cuidar a niños y niñas. Desde allí, Ruth inició su ministerio amado y de largo plazo como maestra de jardín de infancia y primaria. Sus años de enseñanza la llevaron de escuelas en Omaha (Santa Cruz, Santa Inés, Santo Tomás Moro, Santa Margarita María) a lugares en Council Bluffs, Iowa (Sagrada Familia) y Des Moines, Iowa (Santa Trinidad). Ruth también sirvió en Broomfield y Durango, Colorado, como también en Kansas City, Missouri. 

Después de su largo ministerio como maestra, vivió en el plantel de la Universidad de Santa María en Omaha hasta que se mudó a un apartamento en la Residencia Asistida Immanuel en Omaha en abril. Ella tenía un buen sentido de humor y observaba el mundo alrededor agudamente. También tenía mucho orgullo en su herencia irlandesa y un humor irónico que compartía libremente con las demás personas. Su profunda devoción a María le daba fuerza y mucha alegría. Ruth murió en el Memorial del Santísimo Nombre de María. 

Le gustaba pasar tiempo con su familia y amistades dondequiera que viviera y trabajó durante su vida y ministerio como Hermana de la Misericordia. Muchos de sus ex alumnos ofrecieron tributos por su bondad con ellos. Señalaron que Hermana Ruth esperaba mucho de ellos, pero siempre era amable también. Otro antiguo estudiante dijo, en resumen, «¡Qué legado ha dejado!».