Cómo la Campaña de los Pobres refleja los Asuntos Críticos de la Misericordia
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El 20 y 21 de junio, miles de personas se reunieron en línea para participar en una Reunión Digital para la Justicia de la Campaña por los Pobres. En la tradición del Rev. Martin Luther King Jr., en los últimos años, la «Campaña de los Pobres: Un Llamado Nacional para el Renacimiento Moral», se ha movilizado en todo el país para enfrentar la injusticia sistémica que empobrece a millones de personas en el país más rico que el mundo ha conocido y que ahora amenaza a la propia Tierra.
Miembros de la familia de la Misericordia participaron en el evento en línea y compartieron algunas reflexiones.
Hermana Mary Pendergast, Rhode Island
Los temas que la campaña propone transformar incluyen el racismo, la pobreza, el militarismo, la devastación ecológica y la narrativa moral distorsionada. Obviamente, nuestros Asuntos Críticos de la Misericordia están presentes, tanto explícita como implícitamente. Unirse a la Campaña de los Pobres es una forma de unirse a otros que tienen una mentalidad y misión similares.
Hermana Mary Ann Clifford, California
Lo que más me llamó la atención fue el clamor por un salario digno. Los cientos de historias personales de trabajadores pobres realmente me tocaron el corazón. Por supuesto, muchas de las historias eran de personas de piel negra u oscura, que trabajan duro y aun así no llegan a fin de mes. Fue una prueba de realidad. Yo, nosotras, no podemos estar más calladas sobre esto.
Hermana Claudette Schiratti, Nebraska
Me vi obligada a ver esto porque continúa la Marcha de los Pobres que Martin Luther King inició en los años 60. Qué trágico que en 2020 todavía no hayamos progresado mucho. Las historias de los pobres eran desgarradoras. La Campaña de los Pobres es la encarnación de los Asuntos Críticos de la Misericordia. Me mantendré alerta a esta campaña y espero que, como miembros de la Misericordia, nos conectemos a ella colectivamente.
Hermana Janet Rozzano, California
Las historias de personas o grupos reales que luchan diariamente contra la pobreza sistémica en nuestro país fueron poderosas y conmovedoras. Más tarde, leí la Plataforma política para un Jubileo de Justicia Moral de los Pobres. Este documento aborda, directa o indirectamente, todos nuestros Asuntos Críticos, enumerando las prioridades legislativas y políticas y las medidas necesarias para abordarlos. Admito que me siento abrumada por la magnitud de la tarea que se presenta aquí. ¡Hay tanto que hacer! Pero estamos, de hecho, «Todos juntos en esto», o, como dice el principio de la Campaña de los Pobres, «Todos dentro, nadie fuera Todos merecen la abundancia de nuestra nación».
Hermana Carol Mucha, Illinois
Esta campaña encaja perfectamente con nuestros Asuntos Críticos como Hermanas de la Misericordia. Nos alienta a escuchar a los más afectados por nuestra actual falta de liderazgo en los Estados Unidos que se suma al dolor de los más vulnerables. Me conmovió mucho y aprendí mucho, con una nueva mirada sobre el tema.
Hermana Regina Ward, Maryland
Al reflexionar sobre la Campaña de los Pobres, no puedo verla de forma aislada. Con la muerte de George Floyd y las subsiguientes protestas de Black Lives Matter que precedieron a la campaña, reconozco una oleada de temas —pobreza, supresión de votantes, salud, control de armas, supremacía blanca, calentamiento global, inmigración, DACA— que llaman a nuestros Asuntos Críticos a una respuesta.
A pesar de nuestra necesidad de permanecer en casa debido a COVID-19, ahora más que nunca debemos expresar nuestra oposición a la legislación que apoya a los ricos y privilegiados a expensas de otros que con demasiada frecuencia son pobres y marginados. Sigo viviendo en la ESPERANZA y estoy agradecida por toda la gente, especialmente en nuestro Sistema de Educación de la Misericordia de las Américas, MESA (Mercy Education System of the Americas) que se esfuerza por encontrar soluciones mientras escucha a los afectados e implementa el cambio.
Marylyn Felion, Asociada de la Misericordia, Nebraska
He pasado tiempo en América Central, en un comedor de beneficencia de Trabajadores Católicos y con gente en el corredor de la muerte. Fue la lectura de la encíclica del Papa Francisco, Laudato Si’, y el haber comprendido que «el grito de la Tierra y el grito de los pobres» es lo que me impulsó a asistir a la Campaña de los Pobres en línea. La campaña se centra en la intersección de los problemas en lugar de jugar a «golpear al topo» con arreglos temporales o cosméticos. La campaña se centra en la unidad de todo, la interconexión de todo y el mensaje de nuestro Dios, cuyo propio Hijo «escucha el grito de los pobres» y el grito de la amada Tierra a la que vino.
Hermana Christine Blair, Missouri
La campaña está perfectamente en línea con nuestros Asuntos Críticos por la Tierra, la no violencia, el antirracismo, las mujeres y la inmigración. Hablaron tantas mujeres y hombres valientes que no tenían nada y compartieron sus historias de pobreza.
Las vidas pueden mejorar, pero aun así las fábricas abren y contaminan, luego cierran y dejan a una comunidad sin trabajo. La violencia que puede seguir es una respuesta de frustración, y miedo y hambre por algo mejor. La división es amplia entre la gente de color y la gente blanca. Lo que aprendí de la Campaña de los Pobres es que puedo sentirme segura, pero hay todo un mundo que no, y nos llevará a todos a superar la pobreza generacional. Es hora de levantarnos y de que se nos escuche.
Virginia Fifield, Asociada de la Misericordia, Nueva York
Tal vez fue providencial que no pudiéramos reunirnos en persona porque la Campaña de los Pobres pudo llegar a un gran número de personas que de otra manera no habrían participado. Los poderosos oradores sacaron a la luz tantos temas que a menudo se dejan en la sombra. Hablaron de cómo el racismo, tanto cultural como ecológico, niega la esperanza a tantos. Hablaron de cómo nuestro quebrantado sistema judicial victimiza a los que a menudo son olvidados. Les dieron voz a los trabajadores pobres. Hablaron de nuestro sistema de salud, que ha permitido que muchos sufran innecesariamente.
Hay tanto dolor en nuestro mundo hoy en día, tantas injusticias sin abordar. Confío en que la Misericordia será parte de la sanación de parte del dolor y que, como grupo seremos parte del cambio que debe ocurrir. Ser Asociada de la Misericordia me da la audacia de hablar con fe mientras trabajo con la comunidad en general. Ahora es el momento, aquí en este lugar.