Le invitamos a pasar un tiempo contemplativo durante el verano para reflexionar sobre el amor que Dios nos tiene a través de la poesía.
Puede participar a su ritmo y donde se sienta a gusto.
¿Cuál es la gracia que pido a Dios durante este retiro?
¿Cuál es el deseo de Dios para mí en este retiro?
Al adentrarnos conjuntamente en las profundidades, reflexionemos en estas palabras:
Confianza paciente
Sobre todo, confía en la lentitud de la obra de Dios.
Somos naturalmente impacientes en todo
por alcanzar el fin sin demora.
Nos gustaría saltarnos las etapas intermedias.
Nos impacienta estar en camino hacia
algo desconocido, algo nuevo.
Y sin embargo, es la ley de todo progreso
que se hace pasando por
algunas etapas de inestabilidad…
y que puede llevar mucho tiempo.
Y así creo que es contigo;
tus ideas maduran gradualmente, déjalas crecer,
deja que tomen forma por sí mismas, sin prisas innecesarias.
No intentes forzarlas,
como si pudieras ser hoy lo que el tiempo
(es decir, la gracia y las circunstancias
actuando según tu buena voluntad)
hará de ti mañana.
Sólo Dios podría decir lo que este nuevo espíritu
poco a poco irá formando en ti.
Dale a Nuestro Señor el beneficio de creer
que la mano [de Dios] te está guiando
y acepta la ansiedad de sentirte
en suspenso e incompleto.
— Pierre Teilhard de Chardin, SJ