Dos Hermanas de la Misericordia en programa nocturno de televisión
Hermanas Pat Murphy y JoAnn Persch, veteranas defensoras de inmigrantes y de una reforma migratoria no son ajenas a las consecuencias de participar en actos de desobediencia civil para promover las causas en las que creen. Han sido arrestadas dos veces en Washington DC., por protestar pacíficamente y en oración cerca del Capitolio de Estados Unidos. Las dos veces, Pat de 91 años y JoAnn de 86, fueron esposadas y procesadas junto a otros pacíficos manifestantes y liberadas después de pagar una multa.
Así fue que, con gran sorpresa y consternación, las dos hermanas presenciaron el asalto al Capitolio perpetrado por violentos amotinados el pasado 6 de enero, los cuales, aparentemente, se salieron con la suya, al menos ese día. Aunque más de doscientos de ellos han sido arrestados desde entonces, Pat y JoAnn no podían creer el trato que recibieron los insurrectos en el escenario en comparación con el experimentado por los participantes de la marcha Las Vidas Negras Importan (BLM, por sus siglas en inglés) realizada en el verano de 2020 y cómo han sido tratados antes los manifestantes pacíficos en contra de las políticas migratorias norteamericanas.
Las dos fueron invitadas a compartir su experiencia en el programa nocturno de televisión «Full Frontal With Samantha Bee» el pasado 10 de febrero. Ellas fueron entrevistadas remotamente al mismo tiempo que otros dos invitados en persona: una abogada de derechos humanos con discapacidad cuya silla de ruedas fue incautada por la Policía del Capitolio en una manifestación y un hombre que fue detenido, esposado y arrojado sobre el capó de un automóvil en Nueva York por protestar contra las deportaciones injustas. Los dos compartieron sus experiencias de haber sido tratados rudamente por los agentes que los detuvieron mientras protestaban en forma no violenta.
«Lo que sucedió el 6 de enero fue una turba y no un acto de desobediencia civil», dijo JoAnn.
«La desobediencia civil se trata de civiles que protestan por algo que está realmente mal».
Cuando ella preguntó a sus cuatro invitados sobre la manera en la que podríamos avanzar como país, Samantha Bee sugirió en broma que era a través de «pensamientos y oraciones».
«La oración es poderosa», dijo Pat, «pero tienes que poner tu cuerpo también. Tenemos que escucharnos y hablarnos».
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